El Ministerio de Salud ha emitido un comunicado resaltando la importancia de un agua segura para el consumo humano y la necesidad de cumplir con estándares de calidad. El suministro de agua potable de calidad es fundamental para mantener la salud y prevenir enfermedades relacionadas con la ingesta de agua contaminada.
El comunicado destaca que el acceso a un agua segura es un derecho humano fundamental, ya que el agua es esencial para la vida y tiene un impacto directo en la salud de las personas. El consumo de agua contaminada puede llevar a enfermedades transmitidas por el agua, como diarreas, cólera, fiebre tifoidea y hepatitis A, entre otras.
Para garantizar un agua segura, el Ministerio de Salud establece estándares de calidad y reglamentos que deben cumplir los sistemas de abastecimiento de agua potable. Estos estándares incluyen parámetros de calidad relacionados con la presencia de microorganismos patógenos, sustancias químicas y contaminantes físicos.
Además, el comunicado resalta la importancia de la vigilancia y el monitoreo constante de la calidad del agua a lo largo de toda la cadena de suministro, desde la fuente de abastecimiento hasta el grifo del consumidor. Los proveedores de agua deben realizar análisis periódicos y garantizar el cumplimiento de los estándares establecidos.
El Ministerio de Salud también hace hincapié en la responsabilidad individual y comunitaria en el cuidado del agua. Se deben tomar medidas adecuadas de tratamiento, almacenamiento y manejo del agua en los hogares para evitar la contaminación y garantizar su seguridad.
Recolección de agua
- Se debe recolectar en recipientes limpios, sin que entre en contacto con las manos, ni con otros materiales, es importante asegurar que estos recipientes no hayan sido utilizados para almacenar químicos o plaguicidas.
Almacenamiento del agua
- Almacenarse en recipientes cubiertos y sometidos a una limpieza periódica.