Las Fuerzas Armadas están interviniendo el pabellón 3, por segunda vez. El control se mantiene. La fuerza del Estado es contundente contra el crimen organizado.
En una muestra de determinación y firmeza, las autoridades han llevado a cabo una intervención sin precedentes en la Penitenciaría, donde el crimen organizado había establecido su control de manera inquietante. La situación había alcanzado un nivel preocupante, lo que llevó a las Fuerzas Armadas a tomar medidas contundentes para recuperar el control y restaurar el orden en el pabellón 3, conocido como uno de los sectores más peligrosos de la prisión.
Esta no es la primera vez que las Fuerzas Armadas intervienen en la Penitenciaría, y ciertamente no será la última. La amenaza que representa el crimen organizado dentro de los muros de la prisión no puede ser subestimada, y las autoridades han demostrado su compromiso en combatir este flagelo sin dar tregua.
El operativo ha sido meticulosamente planificado y ejecutado, garantizando la seguridad de los reclusos, personal penitenciario y de los propios militares involucrados en la intervención. Se han empleado tácticas de alto nivel para neutralizar cualquier resistencia y asegurar que el control quede firmemente en manos del Estado.
