Un hombre tetrapléjico en Suiza ha sido el primer individuo en probar una novedosa tecnología que combina dos implantes: uno en su cerebro y otro en su médula espinal. Este avance le permite recuperar la movilidad en brazos, manos y dedos a través del pensamiento. La técnica previamente se había utilizado en pacientes parapléjicos para que pudieran caminar nuevamente. Sin embargo, es la primera vez que se emplea esta combinación de implantes para las extremidades superiores.
El paciente, un hombre suizo de 46 años que quedó tetrapléjico tras una caída, se sometió a dos operaciones en el Centro Hospitalario Universitario Vaudois (CHUV) en Lausana, Suiza. En la primera operación, se le implantó un dispositivo cerebral que registra las regiones cerebrales activadas cuando el paciente piensa en un movimiento y las comunica a los electrodos en la médula espinal. La segunda operación consistió en la colocación de electrodos conectados a una caja en su abdomen, a la altura de la médula cervical.
Actualmente, el paciente se encuentra en una fase de entrenamiento para que el implante cerebral pueda reconocer y traducir sus pensamientos en movimientos específicos. Este proceso requerirá meses de repetición y entrenamiento antes de que los movimientos se vuelvan naturales. Los resultados del ensayo clínico, que incluirá a otros dos pacientes, se publicarán más adelante.
La tecnología de doble implante representa un avance significativo en la restauración de la movilidad para personas con parálisis y promete mejorar la calidad de vida de aquellos que han perdido la capacidad de mover sus extremidades superiores debido a lesiones en la médula espinal u otras condiciones médicas.