
Los equipos de rescate que se desplegaron tras el accidente aéreo en Washington la noche del miércoles siguen buscando a 14 personas desaparecidas. Esto después de recuperar varios cuerpos de las frías aguas del río Potomac, donde cayeron las aeronaves.
Las labores de rescate continúan
tras el trágico accidente aéreo ocurrido el miércoles por la noche en Washington. Según informó CNN, citando diversas fuentes vinculadas con el operativo de rescate, los esfuerzos para recuperar los cuerpos fueron suspendidos cuando la noche cayó sobre la ciudad, complicando las condiciones para continuar con las búsquedas.
El siniestro tuvo lugar alrededor de las 20:48, hora local, cuando un helicóptero militar con tres personas a bordo y un avión comercial de American Eagle, que transportaba a 60 pasajeros y cuatro tripulantes, colisionaron en pleno vuelo. El accidente ocurrió mientras el avión se encontraba en su aproximación final al aeropuerto Ronald Reagan (DCA) de Washington, uno de los puntos más transitados de la capital estadounidense.
Las autoridades han descartado la posibilidad de que haya sobrevivientes entre las víctimas del accidente. Este trágico suceso ha sido calificado como el más mortífero de su tipo en Estados Unidos desde el año 2001, con una cifra de víctimas que podría ser aún mayor a medida que avance la recuperación de los cuerpos.
Cantidad de controladores aéreos durante la colisión no era la habitual
Un informe preliminar de la Administración Federal de Aviación (FAA) revela que la cantidad de controladores aéreos durante el accidente en Washington no era adecuada para el volumen de tráfico y la hora del día. El personal reducido obligó a un solo controlador a gestionar tanto el tráfico de aviones comerciales como de helicópteros.
Esta situación ha puesto en evidencia la escasez de personal y las malas condiciones laborales de los controladores aéreos en EE. UU. Un informe de The New York Times ya alertaba sobre jornadas laborales de 10 horas, seis días a la semana, y aunque se han realizado mejoras, aún faltan controladores: de 30 plazas necesarias en el Aeropuerto Ronald Reagan, solo 25 están cubiertas.
La falta de personal es preocupante, especialmente considerando el tráfico aéreo intenso sobre Washington, con más de 100 helicópteros sobrevolando la ciudad cada día.
